jueves, 20 de mayo de 2010

La Salvación



La Salvación

Calvinistas y Arminianos. Dos puntos de vista distintos o dos caras de una misma moneda.

Durante mucho tiempo he escuchado estos dos puntos de vistas distintos de la salvación, por información que he conseguido me entere que no solo tinta corrió bajo este debate, sino que ha llegado a correr sangre.
La intención de este ensayo no es desprestigiar ninguna de las dos posturas, ni a ninguna persona que se incline por alguna de ellas, sino plantear un punto de vista personal respecto al tema de debate.


Premisa principal:

Los atributos de Dios.

Si comenzáramos a nombrar los atributos de Dios en este ensayo nos estaríamos desviando de tema, desarrollando cada uno de ellos y de seguro habría unos cuantos que ni siquiera conocemos.
Cuando planteamos algún tipo de doctrina o punto de vista respecto a la vida de un cristiano nunca tenemos que tomar a Dios como si fuera la suma de todos sus atributos, sino como un Todo con esos atributos incluidos a su persona. Digamos que no puedo tomar a un Dios soberano sin tomar a un Dios justiciero o a un Dios de Amor; todos estos atributos se encuentran en la persona de Dios, no forman a Dios, sino que se encuentran en Él.
Así que tomamos como premisa principal a Dios, YAHWEH, como un Todo acompañado de todos sus atributos.

Premisa secundaria:

Los dos pensamientos.

La Biblia nos enumera muchas veces la soberanía de Dios, los infinito de su pensamiento y lo finito que son los pensamientos humanos comparados con los suyos (Is. 55:8). De esa forma podemos decir en concreto que podemos especular con lo que se refiera a los pensamientos de Dios y asegurar por medio de la palabra los que se refieran a los pensamientos humanos (Deu. 29:29). Siempre y en cada caso limitarse a la palabra y no incluir especulaciones filosóficas o pensamiento paralelo a lo que encontramos en la Biblia.
Así que plantearemos dos puntos de vista, uno especulando con lo que se refiere al pensamiento de Dios (especulación desde la perspectiva humana), y otro de acuerdo con los que Dios dejo establecido en su palabra para que nos manejemos conforme a su voluntad.

La Tesis.

Como dijimos anteriormente, cualquier punto de vista desde la perspectiva de la eternidad será una especulación de acuerdo con lo que encontramos a la personalidad de Dios, para que esta especulación sea lo mas acertada posible tomamos a Dios como un Todo. No se descarta en lo absoluto la soberanía de Dios, pero nunca podré explicar de la forma que Dios usa su soberanía. Tampoco se descarta la gracia de Dios, pero como su gracia es multiforme (1ª Pe 4:10), dar una explicación coherente de ella es imposible. Tratar de explicar como es la persona de Dios y como es su forma de pensar y decidir es como explicar, salvando las distancias, la inmensidad del universo visto por binocular de teatro en la tierra; pero si observamos desde el telescopio Hubble la apreciación del universo será mayor, pero nunca dejará de ser una apreciación (sea mas certera o no) desde un determinado punto de vista.

Uno de los atributos de Dios es que es eterno, otro que es omnisciente; con estos dos podemos decir que Dios desde la eternidad sabía quien sería salvo y quien no.
Se puede hacer esta afirmación con un solo versículo que encontramos en Apocalipsis.

“La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida, se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será.” (Ap. 17:8)

Con solo este versículo podemos ver que el libro estaba escrito desde el principio de los tiempos, así que los que van a ser salvos ya estaban predestinados por Dios para eso; claramente en Efesios vemos que Dios nos ha escogido antes de la fundación de mundo (Ef. 1:3-6), pero encontramos cierto contraste con otro versículo del Apocalipsis.

“Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro.” (Ap. 22:19)

Acá vemos que existe una posibilidad de que los nombres sean borrados del libro de la vida, entonces podemos llegar a decir que esa salvación a la cual Dios nos había predestinado se puede llegar a perder, dado que Dios puede llegar a rechazarnos.

Como dijimos anteriormente para poder llegar a una conclusión coherente no podemos descartar los atributos de Dios para estos casos, sin descartar la soberanía de Dios en ninguna de las circunstancias. Podemos decir que Dios es justo y que su justicia llegará a todos. Sabemos que Dios juzgará a todos (o que ya juzgo a toda la humanidad desde una perspectiva de la eternidad, dado que a Dios no podemos ubicarlo en la dimensión del tiempo porque él es eterno), como es justo no puede poner una condena sin antes ejecutar el juicio, por eso no puedo decir que Dios condenó a los que no van a ser salvos desde el principio de los tiempos, pero esto no quita que Dios conozca su condena. Con respecto a la soberanía de Dios, nunca vamos a poder dar explicaciones exactas solo con la Biblia por que no se puede contener toda su esencia en un libro, vemos el caso de la unción de David como rey de Israel, Dios veía mucho mas allá de los ojos de Samuel (1º Sa. 16:7). También vemos que Dios amó a Jacob y rechazo a Esaú (Ro. 9:13). pero no conocemos el corazón de Dios para poder explicar cada una de sus decisiones, solo podemos especular con el relato de la Biblia. Como vemos en estos casos solo se describe la decisión de Dios sin conocer sus motivaciones o la realidad del corazón de estas personas, salvo en el caso de la unción de David, que tenía un corazón conforme al corazón de Dios pero sin dar mas detalles de esto. No estoy descartando en lo absoluto la soberanía de Dios para ninguno de los casos anteriores, solo digo que no se puede hacer una afirmación tan certera de una decisión tomada por Dios si realmente no conocemos la profundidad del caso y solo basándonos en fragmentos históricos de textos. Reitero, no niego la soberanía de Dios, solo digo que no saquemos conclusiones humanas de esa soberanía. Humanos con mente finita. Dios con multiforme sabiduría.

Es innegable que Dios sabe quien va a ser salvo, pero como dijimos que es un Dios justo no puede dejar de ofrecer a la humanidad la oportunidad de llegar a esa salvación, esto lo vemos en el fundamento del evangelio: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” (Mt. 3:16). Esto lo vemos claro acá, Dios entrego a su hijo por amor al mundo y el quiere que todo los hombres sean salvos y venga al conocimiento de su verdad (1ª Ti. 2:4). De acá partimos que nuestro Señor Jesús entrego su vida por todo el mundo, para que todos puedan aceptar la salvación, por gracia, que él nos ofrece.
Nunca vamos a poder decir si una persona va a ser salva o no solo con lo que vemos ante nuestros ojos, o por juzgar sus actitudes dado que la salvación no es dada por nuestras obras, sino obra de nuestro Señor antes de los principios de los tiempos (2ª Ti.1:9). Si intentamos ver la salvación desde una perspectiva humana diremos que nuestro futuro estará dado por las consecuencias de nuestras decisiones y dentro de ese futuro se encuentra la salvación. Entonces podemos decir que para nosotros la salvación de nuestra alma se encuentra dada por la gracia de Dios y mantenida por nuestro compromiso diario para con Dios (Heb. 12:14), por eso se encuentra la advertencia en el libro de los Hebreos de cuidar la salvación (Heb. 2:3).
 Podemos llegar a la conclusión de los que van a ser salvos son aquellos que fueron predestinados por Dios desde el principio de los tiempos (esto no es especulación), pero esta afirmación no me dice que todos los que acepten a Cristo como Señor y Salvador va a ser salvos, porque si vemos la salvación solo por ejecutar una oración, entonces tenemos un evangelio muy pobre.

También podemos decir que nosotros los humanos, que no conocemos lo que va a pasar mañana, por eso debemos tener la esperanza de la salvación sobre nuestra cabeza (Ef. 5:8) lo que nos hace estar firmes en la verdad. Esto es tener la mente en las cosas eternas y no en la de este mundo.

¿Que hizo la creación para merecer ser creada? ò ¿Qué hizo un muerto para merecer ser resucitado?

Hablando de un caso conocido: Un hombre, creyente, quien acepto al Señor Jesús como su Señor y Salvador, tenía una familia bien constituida y con un hermoso servicio a Dios en la alabanza, este hombre se aparto de todo, dejo a su familia y al Señor y se volvió homosexual, formando pareja con su jefe, a los años este hombre falleció de SIDA y estando aún en la condición de homosexual.

Viendo esto desde la perspectiva eterna su nombre nunca estuvo escrito en el libro de la vida, dado que la Biblia dice bien claro que los sodomitas (homosexuales) no tienen herencia en los cielos. Desde la perspectiva humana este hombre se aparto del camino de verdad por esa razón no fue participe de la salvación.

En 2ª de Pedro 2:20 vemos un claro caso desde la perceptiva humana, si alguien conoce el camino de la verdad y se aparta su estado es peor que el primero, luego este recibirá mayor condenación por haber conocido las verdad y no querer permanecer en la verdad. En Hebreos 10:26 vemos que el conocimiento de la verdad no hace a la salvación, esto es rechazar la gracia de Dios y una forma de blasfemia contra el Espíritu Santo. Así que desde las perspectiva humana nunca se puede afirmar que alguien que tenga conocimiento de Cristo sea de Cristo (1ª Jn. 2:19); esta salvación llega a la persona por la gracia y una fe comprometida con el Señor. De esta fe comprometida vienen las actitudes que nos marcan como cristianos. Las actitudes derivan de una fe comprometida y esta a su vez viene de la gracia de Dios derramada sobre nosotros, es un camino de una sola dirección, viene de Dios hacia nosotros.

Otro punto importante que encontramos desde el punto de vista eterno, es que Dios no nos ha elegido al azar, el libro de Romanos 8:29 nos dice claramente que antes de ser predestinados por Dios, él ya nos había conocido, esto nos deja en claro que antes de la fundación del mundo Dios ya nos conocía y sabía que íbamos a ser salvos, pero este conocimiento es solo de Dios, solo podemos afirmar que Dios nos eligió por que nos conocía.


Conclusiones:

 Viendo desde la perspectiva divina:
Dios es soberano y eterno, desde el principio de los tiempos sabe quién va a ser salvo y los predestino para eso, pero esta decisión no es al azar, él lo sabe porque nos conoce. Pero ese conocimiento eterno y soberano pertenece solo a Dios, él ha escrito los nombres de los salvos en el libro de la vida.

“La Predestinación fue, es y será siempre el resultado del preconocimiento de Dios”

 Viendo desde la perspectiva humana:
Dios es Justo, como Dios es justo se aseguró de darles la oportunidad a todo el mundo de que pueda llegar a ser salvo aceptando a nuestro Señor Jesús como salvador y permaneciendo en sus caminos.


 El aceptar a Cristo como Señor y Salvador no quiere decir que vamos a ser salvos si o si y que nada puede hacernos perder. La salvación es imperdible para aquellos cuyo nombre se encuentra en el libro de la vida, pero no para todos aquellos que dicen haber conocido a Cristo y haber profesado la fe cristiana.

“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?
Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.” (Mt. 7:21-23)

Estas personas durante su vida conocieron el camino de la verdad, pero desde el principio de los tiempos nuestro Dios y Padre Celestial ya conocía sus corazones, por esa razón nuestro Señor los niega, no los conoce, su nombre no esta escrito en el libro de la vida.

 El hombre es finito, y su mente finita no comprende la magnificencia de la grandeza de Dios, por esa razón se debe enseñar a las personas a cuidar, no solo la salvación que viene de parte de Dios, sino todo aquello que Dios nos ha entregado en la vida para que cuidemos, ya que él es el dueño de todo. No debe enseñarse a una persona que este 100% segura de que es salva sin importar su vida, sino hay que enseñarle que debe tener una fe comprometida con Dios para poder guardar sus mandamientos y tener un caminar agradable a sus ojos. Después de todo estamos para enseñar la palabra da Dios y no para ponernos en lugar de Dios para afirmar quienes van a ser salvo y quienes no.

Para cualquier cosa que hagamos en nuestras vidas en el Cronos, nuestra perspectiva humana, siempre es y será el albedrío que tenemos; esa posibilidad de elegir casi todo y lo que en cierta forma produce el juicio sobre la humanidad. Pero desde la verdad eterna, el Kayros de Dios, siempre fue, es y será su preconocimiento de todo, dado que él es eterno y su verdad esta fuera de nuestra perspectiva espacio tiempo.

No hay comentarios: